Expresamos nuestro profundo repudio con la forma en que los trabajadores de la multinacional Kraft-Terrabussi, situada en Pacheco, están siendo tratados. Consideramos intolerable la brutal represión impartida por el gobierno local, a mando de la patronal norteamericana, a través de las fuerzas represivas que resultó en heridos y militarizó la fábrica el día 25 de septiembre.
Los trabajadores están ejerciendo su derecho a la movilización contra los 160 despidos, de carácter abiertamente arbitrario y persecutorio por parte de la dirección norteamericana de la empresa. Eso se demuestra, incluso, en el despido de los delegados de base de la empresa, calificando el acto de la patronal como persecusión política e intento de impedir la organización de los trabajadores, derecho democrático previsto por la ley.
Si hay alguien que está faltando el respeto a las leyes argentinas es justamente la patronal de Kraft-Terrabusi. La dirección del grupo norteamericano primero se negó a cumplir la conciliación obligatoria ordenada por la justicia. Después, en un acto ilegal para coaccionar a los trabajadores se negó a pagar la totalidad de los sueldos, afirmando que solo lo haría mediante la expulsión de los despedidos.
Por lo tanto, en vista del carácter justo de la movilización de los trabajadores y de las trabajadoras de Kraft-Terrabusi Argentina, nos pronunciamos por el fin inmediato de la represión, por la salida de la policía y de las fuerzas represivas de la fábrica y por la liberación inmediata de todos los presos.
SINTUSP - Sindicato de Trabalhadores da USP
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