En Alemania, la burguesía discute el mejor camino para parar la crisis. Las fracciones de la burguesía están de acuerdo que debería pasar por ataques a la clase obrera, no están de acuerdo solamente en la velocidad y escala de estos ataques. El conflicto está resuelto en este momento a favor del partido conservador, CDU, de la canciller Angela Merkel, quien mantiene el “pacto social” con los sindicatos y limita sus ataques, por ahora, a los trabajadores precarizados y desempleados, mientras financia paquetes de rescate sin precedentes para los bancos y empresas.

Hasta ahora, no había casi ninguna movilización de importancia por parte de los aparatos reformistas. Ni el SPD, ni el partido Die Linke, ni la burocracia sindical tienen siquiera las mínimas respuestas. El SPD no organiza la resistencia: es responsable de la mayoría de los ataques a las conquistas históricas de la clase obrera. Pero el partido Die Linke también está totalmente pasivo y propone como única respuesta a la crisis una mejor regulación de los mercados financieros. Pretendiendo que podría existir un capitalismo sin crisis, Die Linke se prepara para la participación en más gobiernos.

Mientras tanto, hay comienzos de voluntad de lucha en los sectores más avanzados de la clase obrera. Como los empleados de la productora de automóviles Daimler en Stuttgart-Sindelfingen, donde se está empezando a formar una corriente de oposición en los sindicatos. Además, en los últimos meses, cientos de miles de estudiantes fueron a las calles para exigir un sistema educacional más justo. Para combinar en el futuro las luchas de estudiantes y trabajadores, vemos la necesidad de construir fuertes organizaciones marxistas revolucionarias, tanto en las universidades como en las fábricas. No hay mucha inspiración por luchas triunfantes en Alemania, pero las luchas de Zanon y Kraft-Terrabusi, dirigidas por la FT, pueden mostrar el camino, muestran la necesidad y la posibilidad de llevar un programa marxista revolucionario a la clase obrera. Para tal programa se necesita un marco internacional, por eso, nosotros de RIO queremos discutir intensamente con la FT y propusimos un Comité de Enlace para sondear las posibilidades de colaboración en los niveles programáticos y prácticos.