En Alemania comienzan ahora las negociaciones del contrato colectivo para los dos millones de trabajadores en el sector metalúrgico. En este contexto, las manifestaciones sindicales en el primero de mayo fueron algo más grandes que en años anteriores.

El actual crecimiento económico lleva a sectores importantes del movimiento obrero a reclamar mejoras salariales, ya que las burocracias sindicales pactaron el estancamiento salarial absoluto desde el comienzo de la crisis económica mundial para ayudar al capital alemán. Ahora los burócratas tienen que mostrarse algo más combativos en su retórica ante un sentimiento generalizado de que los trabajadores deberían recibir algo de las enormes ganancias de los capitalistas. Este sentimiento se expresó también en las marchas en el Día Internacional de los Trabajadores organizadas por la confederación sindical DGB, tradicionalmente muy burocratizadas y bastante pequeñas.

Así, en Berlín asistieron varios miles de trabajadores a la marcha sindical por la mañana, notablemente más grande que en años anteriores. Militantes de la Organización Internacionalista Revolucionaria (RIO según sus siglas en Alemán) sección simpatizante de la Fracción Trotskista – Cuarta Internacional, participaron con una columna clasista organizada por distintas corrientes de la izquierda radical.

Luego, a las seis de la tarde tuvo lugar una marcha por la revolución social con más de 15.000 personas. Hace 25 años, el 1 de mayo de 1987, estallaron disturbios en el distrito de Kreuzberg en el entonces Berlín Occidental. Desde entonces había una marcha revolucionaria cada año en el primero de mayo – pero también esta marcha fue significativamente más grande que en años anteriores.

La marcha revolucionaria fue acompañada por un contingente de 7.000 policías que atacaron a los manifestantes numerosas veces y disolvieron la manifestación a las nueve de la noche, mucho antes de llegar al distrito del gobierno, aunque la ruta había sido aprobada por la propia policía. En la situación actual es obvio por qué el imperialismo alemán quiere prohibir una asamblea anticapitalista en su capital, sobre todo si muestra una fuerte señal de solidaridad con los trabajadores en lucha contra el imperialismo alemán en toda Europa (por ejemplo, se tocó "La Internacional" con letras en griego para solidarizarse con las luchas en Grecia).

RIO se hizo presente en las ciudades de Berlín, Múnich y Saarbrücken, con universitarios, secundarios del grupo "Red Brain" (cerebro rojo) y algunos trabajadores, entre otros del hospital Charié que estuvo 13 semanas en huelga a finales del año pasado. Presentamos el tercer número de la revista politica-teorica "Klasse Gegen Klasse" que se puede leer en www.klassegegenklasse.org.
02-05-2012