Esta mañana desde las 10 de la mañana la Guardia Civil, bajo la orden de la Audiencia Nacional ha iniciado en Hernani, Bilbo, Gasteiz e Iruña el registro de las sedes de Herrira, organización del movimiento por la defensa de los derechos de los presos políticos vascos.

Frente a este hecho desde Clase contra Clase queremos repudiar rotundamente y condenar la constante persecución y represión por parte del Régimen y de las instituciones represivas del Estado, que una vez más persiguen de manera implacable con una ofensiva política y antidemocrática a los activistas, a las plataformas en defensa de los presos y a las organizaciones del entorno de la izquierda abertzale.

La operación se ha saldado con un total de 18 detenidos. Diez de los activistas de Herrira, dirigentes de la organización, se encontraban en una reunión de dirección nacional en Hernani, cuando la Guardia Civil irrumpió con todo el dispositivo. Durante el registro de la sede se les ha retenido con la presencia tan solo de un abogado de oficio que asistía al registro y finalmente se los han llevado detenidos. Los otros ocho han sido detenidos en sus respectivas localidades.

Uno de ellos, Meñike, ya sufrió la fuerte represión policial y judicial del Estado, dirigida contra la juventud y el entorno abertzale. Cuando la Audiencia Nacional en el macro juicio que en el 2005 le condenó como dirigente de Jarrai imputándole el delito de asociación ilícita. En este operativo se intentó vincular con la violencia callejera y la pertenencia a ETA a los 33 jóvenes activistas de las organizaciones juveniles Segi, Haika y Jarrai, así como a las Herriko Tabernas, las plataformas de apoyo a los presos políticos vascos y las organizaciones del entorno abertzale.

Entre los argumentos que justifican la intervención del operativo de hoy no podría faltar el más recurrente de todos, según el cual Herrira sería una organización que enaltece, ensalza y justifica la figura de los presos políticos vascos; acusándoles de ser los organizadores de los ongi etorri, actos políticos de bienvenida que se hacen a los presos políticos vascos que son puestos en libertad. La Audiencia Nacional, le heredera del Tribunal de Orden Público del Franquismo, no guarda ya ni las formas de sus acusaciones, un verdadero testimonio de su desprecio a la más mínima libertad de expresión.

Igualmente, alegan que se trata de una organización con una gran capacidad de movilización y activación social. Algo que es real y no deja de poner de manifiesto como el Régimen que no duda en reprimir y hacer malabares jurídicos para aplastar los movimientos en favor de las demandas democráticas no resueltas por él - como el derecho de autodeterminación de los vascos-, reprimiendo a los luchadores y los presos políticos vascos, y persiguiendo institucional y judicialmente a sus organizaciones. Situación de excepcción que cada vez cala más hondo en la sensibilidad del pueblo vasco, que no duda en manifestarse para denunciarlo.

En el operativo que han llevado a cabo esta mañana, los militares han desplegado un amplio dispositivo con vehículos todoterreno, furgonetas y decenas de agentes.

La represión del Régimen y sus instituciones no sólo la han puesto en práctica vía judicial o a través del ejercicio de la fuerza y la militarización de la zona, algo a lo que lamentablemente ya nos tienen acostumbrados. Además han avanzado de forma contundente sobre el derecho de libre organización y de libertad de expresión y de prensa censurando los medios de comunicación en la web de los que se servían como organización. Así pues, según el Ministerio de Interior, la Audiencia Nacional ha ordenado el precinto de cada una de las sedes, así como el cierre de 32 perfiles de Twitter, 125 perfiles de Facebook y 38 páginas web, además del bloqueo de las cuentas bancarias utilizadas por Herrira.

La respuesta condenando y rechazado lo ocurrido ha sido inmediata y frente a todas las sedes se han congregado cientos de personas para protestar por la redada y expresar su apoyo a Herrira y a los detenidos. Así mismo, se han convocado movilizaciones tanto en Euskadi como en Iruña y en Iparralde, a lo largo del día.

Igualmente, EH Bildu se ha pronunciado al respecto declarando que es un “ataque a la normalización política y un nuevo obstáculo para avanzar en un proceso de paz” y ha anunciado que buscarán una “respuesta como pueblo”.

Frente a este hecho desde Clase contra Clase, denunciamos y condenamos la violencia política a la que es sometido el colectivo de presos políticos vasco, así como la persecución política y antidemocrática que aplica el Régimen sobre el entorno de la izquierda abertzale.

Exigimos y defendemos la puesta en libertad de todos detenidos y el resto de los presos políticos vascos, condenamos la política penitenciaria que aplica el Estado Español - que reprime y coarta los derechos de todos los luchadores detenidos – y nos sumamos a la pelea porque la izquierda abertzale pueda ejercer la mayor la libertad de organización, reunión, expresión y manifestación.