Con la presencia de más de cuarenta personas se realizó este jueves 13/9 el Foro organizado por la LTS a los 72 años del asesinato de Trotsky en la Escuela de Sociología de la Universidad Central de Venezuela (UCV), convocada con el título de “El marxismo de Trotsky y el mundo de hoy”. Se proyecto en el comienzo del evento el Documental “León Trotsky (1879-1940) - Homenaje biográfico” preparado exclusivamente para las conmemoraciones del 72 aniversario de su asesinato, donde se hace un recorrido biográfico de la vida política de Trotsky, para luego escuchar las ponencias de Giovanni Ciavattone, de la Escuela de Historia e integrante de la LTS, y Ángel Arias, profesor invitado de la UCV y también dirigente de la LTS. Se trató del único evento realizado en homenaje a León Trotsky en todo el país en el aniversario de su asesinato.

El compañero Ciavattonne realizó una exposición en la que hizo un recorrido político de la vida de Trotsky centrando su ponencia tanto en la intervención en los grandes acontecimientos que participó activamente Trotsky a lo largo de su vida hasta su asesinato así como también centrando su ponencia en sus grandes elaboraciones teórico-políticas como estratega de la revolución. Planteando también que “Trotsky fue, de la generación de grandes dirigentes revolucionarios marxistas del siglo XX, quien más tiempo vivió, quien pudo vivir y analizar mayor cantidad de acontecimientos y procesos agudos de la lucha de clases (la burocratización de la URSS y la contrarrevolución, la revolución china de 1925-1927, el ascenso del fascismo en Alemania, la guerra civil y revolución españolas del 36’ al 39’, el Crack del ’29 y la Gran Depresión que le siguió en los 30’s, el “New Deal”, el surgimiento de nacionalismos burgueses en América Latina (como del Lázaro Cárdenas en México), incluso el inicio de una nueva guerra mundial”.

Por su parte Ángel Arias, empezó abriendo con la interrogante “¿Por qué reivindicar hoy a alguien que pensó y actuó hace más de siete décadas?”, afirmando que “a menudo algunos sentidos comunes impuestos se proponen descartar de antemano determinados planteamientos por ´anticuados´… mientras se fundamentan los parámetros ideológicos, sociales y políticos con base a ideas y personajes realmente ´antiguos´ el ´liberalismo burgués´ (neoliberalismo hoy) o el republicanismo y nacionalismo de los fundadores de la república (todos pensamientos bastante más ´viejos´ que el pensamiento marxista revolucionario), pero que en realidad solo se descarta por supuestamente ´pasado de moda´ lo que puede ser hostil al orden social actual…”. Arias enfatizó que vivimos hoy en “un mundo convulsionado por los primeros años de una profunda crisis capitalista, de connotaciones históricas, en el sentido que concentra condiciones y necesidades de importantes cambios y acontecimientos trascendentales para el orden capitalista mundial. Entre estos, la posibilidad real de grandes y verdaderas revoluciones sociales. Aunque también la posibilidad de importantes derrotas o mayores penurias y sufrimientos para las clases explotadas y pueblos del mundo en general si los explotados del mundo no nos organizamos alrededor de una estrategia y un programa revolucionario. ¡Por eso importa con qué perspectiva, herramientas teóricas y estratégicas nos preparamos para tales circunstancias!”.

Los ponentes desarrollaron la idea que hay algo fundamental, pero que no es evidente, menos en nuestro país donde –por diversas circunstancias históricas– el “marxismo” que comúnmente se conoció fue precisamente toda la deformación y falseamiento venido de la contrarrevolución burocrática que se instaló en la Unión Soviética en manos. Es que el pensamiento y la acción política desarrollada por León Trotsky, por representar la continuidad con la perspectiva revolucionaria del marxismo, de todas las corrientes que actualmente de reivindican “marxistas”, es el trotskismo la única corriente que mantiene en pie la perspectiva de la emancipación social y política de los trabajadores y trabajadoras como una necesidad y posibilidad real para la actualidad, no para dentro de cien años o para futuras “etapas” obligadas que la historia se supone debe cumplir “antes” de que las mayorías trabajadoras y empobrecidas puedan plantearse su propio orden social y su propio poder político.

Ángel Arias destacó que la perspectiva de Trotsky que reivindicamos, es la que mantiene en pie la apuesta de “tomar el cielo por asalto” (como llamara Marx a la gran gesta de los obreros y obreras de La Comuna de París)”, “tomar el cielo por asalto” no en frases o discursos, sino en la lucha concreta, es la perspectiva de que la sociedad puede y debe reorganizarse sin explotación de los trabajadores ni opresión, de que la clase que produce la casi totalidad de las riquezas sociales, la clase que todos los días hacer andar las ruedas del mundo, puede aspirar a un orden social sin empresarios, banqueros, militares burgueses y políticos burgueses, aspirar a su propio gobierno, a su autodeterminación social y política generalizada, reorganizando la producción y la economía social sobre la propiedad común de las riquezas sociales, que son generadas precisamente a través el trabajo social colectivo, y mediante el autogobierno, un gobierno ejercido por los organismo de democracia directa de los trabajadores y trabajadoras, campesinos y pueblo pobre. La perspectiva marxista de Trotsky, que recoge las lecciones estratégicas de los más importantes acontecimientos históricos y procesos revolucionarios del siglo XX, es fundamental para guiarnos en el mundo de hoy.

También los ponentes destacaron que “Trotsky, al expresar la continuidad del pensamiento y perspectiva libertarias de los fundadores del marxismo y del bolchevismo, al compartir junto a Lenin la apuesta por la autoemancipación de las grandes mayorías trabajadoras y pobres, representa ese marxismo que puede no solo dar respuesta concreta sino también entusiasmar a millones de trabajadores y jóvenes de las nuevas generaciones que pueden arrastrar con el descrédito en que cayó el marxismo gracias a la contrarrevolución en la URSS (y que se expresó a nivel mundial de múltiples maneras). Un descrédito alimentado por los teóricos, ideólogos y propagandistas de la sociedad burguesa, con base a lo que se convirtió la URSS, pero completamente interesado y falso, pues precisamente esta “URSS” bajo el stalinismo se erigió liquidando la memoria, conquistas y dirigentes de la revolución obrera y campesina, esa “URSS” aniquiló al partido, a la vanguardia obrera y a los dirigentes que llevaron a cabo la revolución, incluyendo la liquidación física de quien fuera, junto a Lenin, el principal dirigente de la primera revolución obrera triunfante de la historia”.

Es de destacar que durante el evento se realizó toda una serie de preguntas, intervenciones y debates con los presentes alrededor de la figura de Trotsky como revolucionario y diversas problemáticas del momento actual. Al final los compañeros remarcaron que “Trotsky, en su figura, con su vida militante y su obra, representa la lucha contra toda esa falsificación del marxismo”.