Argentina - Editorial La Verdad Obrera 575
Con los obreros, sí; con los buitres, no
26/06/2014
Tras la pirotecnia verbal, el gobierno se rindió ante el juez de Nueva York y se prepara para negociar con los fondos buitre. Thomas Griesa designó a Daniel Pollack como mediador, un abogado “con fuertes raíces en la comunidad inversora de Wall Street” (La Nación, 23/6). La “estrategia” oficial seguirá regida por abogados yanquis del estudio Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton. La políca de dormir con el enemigo ya la habían usado los K mientras cursaba la apelación ante la Corte estadounidense, confiándole la tarea a Paul Clement, un ex funcionario de George W. Bush.
Supuestamente su intervención favorecería a Argentina. Los resultados están a la vista. Hasta en los “detalles” se nota la pleitesía “nacional y popular” al imperialismo. Ellos ponen la cancha, la pelota, los árbitros y hasta los jugadores que deberían defender los colores nacionales.
Un ministro en aprietos en Nueva York
Axel Kicillof aprovechó una invitación de último momento y viajó a Nueva York a defender la postura del gobierno argentino frente al “G77 + China” (el grupo de los “países en desarrollo” -semicoloniales y dependientes- dentro de la ONU). La semana pasada proclamó que los buitres “no pasarán”. Pero en la capital mundial de las finanzas su relato fue menos épico.
Para el Financial Times el fallo de Griesa es una extorsión contra Argentina. La Conferencia de Naciones Unidas sobre el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD) alertó sobre las consecuencias en futuras reestructuraciones. A favor de Argentina, se pronunciaron la CELAC, la UNASUR y los países latinoamericanos. Incluso previamente el gobierno de Barack Obama, Francia y hasta el FMI se manifestaron contra los buitres. Estas “solidaridades” no hablan de una causa común del mundo con nuestro país. Más bien lo que se develó, además de la pérdida de soberanía que implica la deuda externa, es la ausencia de mecanismos consensuados para reestructurar deudas, inscriptas en la situación. Es que la crisis mundial sigue, aunque esté relativamente contenida por la intervención estatal para salvar a los bancos y hundir a los trabajadores. Lo que reclama el stablishment son reglas claras para organizar el banquete carroñero de los buitres. El kirchnerismo intenta usar este lobby internacional y el viaje del ministro para alivianar la derrota ante los buitres y “maquillar” un poco la entregada.
Contrarreloj
Si no se establece nuevamente el “stay” (cautelar) para suspender el fallo de Griesa, el 30 de junio Argentina habrá incumplido con la parte de la deuda que se paga en Nueva York. Un mes después entraría en default técnico, frustrando la vuelta a los “mercados” para conseguir dólares que permitan salir de la recesión económica por la escasez de divisas. “Pedimos no tener que resolver esto en tres días”, rogó Kicillof en Nueva York. El gobierno quedó preso de las reglas y jurisdicciones de pago aceptadas por Lavagna y Kirchner, por De la Rúa y todos los gobiernos anteriores.
Los trascendidos son muchos. Desde que Goldman Sachs se ofreció como intermediario proponiéndole al gobierno una operación como la hecha con Repsol, hasta que hay un principio de acuerdo (según Aldo Pignanelli, ex presidente del BCRA con Duhalde), hasta la visión opuesta según la cual los fondos buitre podrían jugarse a imponer el default, cobrar un seguro especulativo y a la vez seguir el litigio para cobrar los bonos (Página 12, 21/6). Aunque el gobierno argentino quiere negociar, “patriada” en la que es acompañado por toda la oposición patronal de Massa, FAUNEN y Macri, no está descartado que los buitres impongan condiciones imposibles que lleven al cese de pagos el 30 de junio. Todas las alternativas están abiertas. Las negociaciones no estarán exentas de tensiones que repercutan sobre la economía con nuevos cimbronazos, corridas cambiarias o devaluaciones.
Ataque a los luchadores y a la izquierda
Pero los capitales imperialistas se fijaron otro objetivo. Como dicen los trabajadores de Lear y Donnelley: “Nos atacan los patrones buitres”. Las multinacionales yanquis están montando una ofensiva contra los trabajadores y su organización. Lear Corporation, que facturó a nivel global U$S1.800 millones, primero suspendió a 300 trabajadores en la planta de Pacheco, ahora suspende a 200 pero sin pagarles. El Ministerio de Trabajo dijo que eso es ilegal, pero la patronal las mantiene. ¿El SMATA? Ya demostró en VW y Gestamp que su compromiso es con los empresarios y no con los trabajadores en lucha.
RR Donnelley, la gráfica líder en el mundo, presentó un preventivo de crisis y pretende despedir 123 trabajadores de su planta de Garín. ¿Crisis en una empresa que en 2013 declaró ganancias por U$S218 millones a nivel mundial y lidera el mercado editorial del país?
Las empresas yanquis quieren ganar más echando trabajadores, declarando una crisis que jamás podrían demostrar. Pero no es casual. Con los buitres marcando el ritmo de la situación política, el gobierno y las multinacionales han decidido lanzar una ofensiva contra los trabajadores y la izquierda. Atacan allí donde tiene peso el sindicalismo combativo y de izquierda, en este caso en la Zona Norte. A los que fueron parte del Encuentro Sindical Combativo de Atlanta y luego destacaron en el paro del 10 de abril una expresión independiente de la burocracia. Los que participaron del encuentro regional que se realizó en esa zona y más tarde participaron de los piquetes y movilizaron para apoyar a Gestamp en su lucha.
Está por verse si pueden avanzar con su ofensiva. Primero, porque los trabajadores han mostrado que van a ofrecer resistencia. Y además, porque también hay bronca en los gremios donde tiene peso la burocracia oficialista, como se vio en telefónicos, en la alimentación y antes se había visto en las huelgas docentes de todo el país.
La burocracia opositora, mientras tanto, mantiene la tregua. Los Moyano no pueden ser más oportunistas: Hugo dice que el pago de la deuda se descargará sobre los trabajadores, pero su hijo Pablo sale a decir que hay que negociar con los buitres.
Los ataques también llegaron a los legisladores que apoyan estas luchas y denuncian los negociados con el imperialismo. En Córdoba, Mendoza y Salta atacan a los legisladores del FIT, amenazándolos con sanciones. Rechacemos también esta ofensiva y defendamos las bancas del Frente de Izquierda.
Con los obreros de Lear y Donnelley, contra los buitres
Hagamos nuestra la denuncia de los trabajadores: “Las multinacionales yanquis quieren el hambre de nuestros hijos para garantizar sus abultadas ganancias”.
El PTS votó en su XIV Congreso una campaña de apoyo a los obreros de Lear y Donnelley y a todos los que luchan contra los despidos, las suspensiones y en defensa del salario. Este jueves 26 nos concentramos en Callao y Corrientes a las 16 hs, para marchar luego a las 18hs hasta la Cámara de Comercio Norteamericana.
El Congreso reiteró el llamado a profundizar el camino iniciado en el Encuentro Sindical Combativo de Atlanta, convocando a un nuevo Encuentro Nacional, masivo y unitario. Creemos que esa será la forma de pararle la mano a los empresarios, al gobierno, los partidos patronales y la burocracia oficialista, levantando una alternativa a la burocracia opositora de Moyano y compañía. Insistimos en convocar a todas las corrientes clasistas y combativas, como el PO, a sumarse.
Las consecuencias de un nuevo acuerdo con los “buitres” volverán a ser pagadas por el pueblo trabajador. Por eso decimos: no al pago de la deuda, abajo los acuerdos con el capital financiero imperialista.
La crisis de la deuda, incluyendo el pago al Club de París y todos los acuerdos con el capital imperialista, no deben ser debatidos a espaldas del pueblo. Por eso planteamos: consulta popular vinculante y movilización de masas contra la entrega nacional.