Escalada de protestas en Grecia
09/06/2011
En medio de una crisis económica que sigue profundizándose, se ha visto una escalada de las protestas en el país helénico, siendo la manifestación del domingo 5 de junio el punto más alto de las mismas cuando casi 80 mil personas se concentraron en las cercanías de la Plaza Sintagma (Constitución). La manifestación se desató ante el peligro de un nuevo programa de austeridad luego del anuncio del acuerdo entre la Comisión Europea, el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional con el gobierno de Giorgos Papandreou a través del cual se concedía la quinta cuota del paquete de rescate. El nuevo paquete de ajuste, hace que la economía del país se vuelva cada vez mas inestable al aumentar los niveles de riesgo e imponiendo condiciones más duras, entre otras, mayores despidos en el sector público.
La continuidad del activismo y oposición en las calles y lugares de trabajo ha dado lugar al surgimiento de un nuevo movimiento de protesta, llamado los ‘indignados griegos’ ya que siguen el ejemplo de sus hermanos y hermanas españoles ocupando la Plaza Sintagma en Atenas, y cuyo método de marchas vespertinas se viene manteniendo de manera cotidiana. Como parte de este nuevo fenómeno, además, se han venido organizando asambleas por barrio que se han transformado en instancias de discusión y organización del movimiento de protestas, que a su vez ha confluido con el movimiento “No pagaremos”, cuya principal forma de oposición al programa de ajuste es la de negarse a pagar los peajes de las carreteras y rutas.
Fue así como luego de una semana de protestas en la Plaza Syntagma, jóvenes, empleados públicos, jubilados, desempleados, y grupos de activistas de los distintos colectivos confluyeron como vertientes a un mismo río en la Plaza que se ha convertido en el punto de referencia del movimiento de oposición a los planes de ajuste.
Como en un círculo vicioso, cada paquete de ajuste en vez de resultar en un alivio a la crisis económica reinante en el país, actúa como un elemento que motoriza el movimiento contestatario, dinámica que, a su vez, tensa más el tablero político, y va aumentando la brecha entre la clase política y los trabajadores y las masas urbanas. Por otra parte, las declaraciones del vice-primer ministro que le dice a los trabajadores de bajos ingresos y a los desocupados “hemos gastado el dinero juntos” no ha hecho más que avivar el fuego generando una mayor bronca hacia los políticos mayoritarios. Este fenómeno es perceptible en el rechazo de la población a los parlamentarios –tanto a los diputados del PASOK en el gobierno como a los de Nueva Democracia en la oposición pero con quien el primer ministro busca lograr consenso parlamentario– que se han vuelto en el blanco de ataque de las protestas. Vistos como personas ‘no gratas’ y se ha vuelto un hecho común que los protestantes acudan a las cercanías del Parlamento o al lugar de las negociaciones para tirarles huevos en señal de repudio al grito de ¡Ladrones! ¡Váyanse!
A un año de las negociaciones de rescate entre Grecia y los organismos financieros internacionales iniciadas en mayo de 2010, son cada vez más frecuentes las voces de descontento entre analistas económicos que critican los acuerdos diciendo que los cálculos en su momento fueron muy optimistas y tenían un cronograma muy optimista de la recuperación de la economía.
Con este telón de fondo hay convocada una nueva movilización para el sábado 11 de junio, junto a esta medida las confederaciones sindicales convocaron una huelga general para el 21 de junio –pero dada la incertidumbre de su situación los trabajadores de las empresas a ser privatizadas ya están planificando huelgas coordinadas antes del paro general. Aspiramos a que los aires de rebeldía de la juventud española con su incipiente confluencia con sectores de trabajadores motive de manera redoblada en los trabajadores, la juventud y los desocupados griegos, para dar lugar a un nuevo y más potente movimiento que derrote el plan de ajuste del PASOK y avalado por la oposición que día a día impone nuevos recortes y ataques a las condiciones de vida de la población,