Tras la represión y el desalojo del Zócalo
Continúa la lucha del magisterio mexicano
19/09/2013
El viernes 13 de septiembre el plantón (acampe) de los maestros en el Zócalo de México DF fue violentamente desalojado, con un saldo de numerosos maestros y jóvenes heridos y más de una treintena de detenidos. La represión coordinada del gobierno federal del PRI y el gobierno capitalino del PRD, suscitó un amplio movimiento democrático y de repudio contra la represión, en tanto que el magisterio trasladó su plantón a otra plaza importante de la ciudad, el Monumento a la Revolución. Por ejemplo, el mismo viernes, más de 1.000 estudiantes se congregaron en el Auditorio Che Guevara de Ciudad Universitaria de la UNAM, resolvieron apoyar la lucha del magisterio y convocar a una movilización para el domingo 15 de septiembre, fecha en que se conmemora la independencia de México y cuando se realizaría, en el Zócalo, un acto oficial encabezado por el presidente represor Peña Nieto. El sábado, un nuevo y segundo Encuentro Magisterial con más de 500 representantes de distintas secciones del magisterio, organizaciones políticas y sociales, resolvió un plan de acción para los días siguientes, que incluía el llamado a un “paro cívico nacional” para el jueves y viernes de esta semana y la retoma del Zócalo capitalino durante el miércoles 18/9.
En medio del descontento popular los estudiantes vuelven a movilizarse
La movilización del domingo 15 congregó alrededor de 35.000 manifestantes, encabezados por varias seccionales de la CNTE y con la participación de representaciones de otros sindicatos. Al grito de “aquí y ahora, con la coordinadora”, nutridos contingentes estudiantiles -aproximadamente la mitad de la manifestación- se hicieron presentes, provenientes de distintas facultades y bachilleratos. La lucha del magisterio y la represión gubernamental catalizó un amplio movimiento democrático, de recomposición y politización en la juventud estudiantil, que retoma el proceso iniciado en 2012 con el #yosoy132, y que está dando lugar a movilizaciones estudiantiles como no se veían desde la huelga de la UNAM en 1999-2000.
El gobierno -que se mantiene firme en su reforma educativa- está concentrando el descontento obrero, popular y juvenil con los planes del “nuevo PRI”, que como coreaban miles, es el mismo viejo dinosaurio priista. Como continuidad de este proceso, el martes y miércoles se realizaron masivas asambleas en las distintas escuelas y facultades. Con una participación histórica, que en muchas asambleas rebasó los 1.000/1.400 estudiantes, alrededor de 25 planteles y universidades resolvieron por mayoría de votos el paro en solidaridad con el magisterio.
Por un gran Paro Nacional contra el gobierno represor
El miércoles miles de manifestantes del magisterio, del Sindicato Mexicano de Electricistas, y nutridos contingentes estudiantiles, se movilizaron del Monumento a la Revolución a la Plaza de Tlatelolco. El resguardo del Zócalo por parte de miles de policías y el mismo Estado Mayor Presidencial, impidió la acción de volver a esa plaza y trasladar allí el plantón, como era el sentimiento de amplios sectores de las bases magisteriales. Los próximos días serán de paro cívico nacional, y algunos sindicatos -como los trabajadores de Educación Media Superior del DF- anunciaron que se sumarán a la medida de lucha, y en la que participará también activamente el movimiento estudiantil, en tanto que el próximo domingo 22/9 está anunciada una movilización nacional contra la reforma energética.
Desde la LTS, hemos participado, junto a los compañeros maestros que impulsan el Boletín Nuestra Clase y la Juventud Anticapitalista Socialista y Revolucionaria, planteando una política para el triunfo de la lucha del magisterio frente a un gobierno que se mantiene firme en su postura y que apuesta a derrotar la movilización actual. En particular, llamando a fortalecer y extender la lucha contra la reforma al conjunto de los trabajadores de la educación (donde hay cientos de miles que no están organizados bajo el magisterio democrático, esto es la CNTE, sino en el sindicato oficial, el SNTE), así como desde la CNTE -y desde los sectores obreros, populares y juveniles que están participando de la lucha- se haga un llamado explícito a los sindicatos, y en primer lugar a aquellos que se reclaman opositores y democráticos -como son los organizados en la Unión Nacional de Trabajadores- a preparar, conjuntamente con el magisterio, un Paro Nacional contra la represión al magisterio y contra las reformas educativa y energética.