VENEZUELA
Elecciones, crisis, pugnas y saltos de talanquera
08/08/2015
A cuatro meses de realizarse las elecciones parlamentarias a nivel nacional, el 6 de diciembre, a la crisis económica imperante se le agrega ahora conatos de tensión social expresados en saqueos a supermercados y comercios en algunas ciudades del país, aunque por ahora muy focalizados. Aunque lo llamativo en esta semana, en la que se presentan las postulaciones ante el Consejo Nacional Electoral (CNE), han sido las sorpresas que se han llevado tanto sectores del chavismo como de la oposición en las listas finales de los candidatos a la Asamblea Nacional.
En un artículo de finales de junio en este diario escribíamos que las elecciones parlamentarias de diciembre se realizan bajo la tensión de la crisis económica y explicábamos las causas de la demora del CNE en definir la fecha precisa como las presiones que tuvo al respecto, tanto en el plano externo como el interno. Una crisis que viene golpeando el nivel de vida de la población aumentando la carestía de la vida que cada vez más se siente y tiende a aumentar la tensión social que se comienza a expresar en conatos de saqueos tal como lo analizábamos en un artículo de esta semana sobre lo acontecido en la ciudad de San Félix, al oriente del país.
Pero también señalábamos en el artículo de junio las internas tanto en las fuerzas de la oposición, como así también hacia lo interior del chavismo, con tensiones internas que no suelen manifestarse públicamente, al menos entre los sectores de más peso y sí la inconformidad por abajo. Desde el lunes de esta semana se comenzaron a presentar las listas formales de los candidatos de los principales bloques políticos y agrupamientos menores, donde quedaron más de manifiesto las realidades internas, crisis, imposiciones tanto en la oposición como en el chavismo. Sobre este tema es en lo que nos detenemos en este artículo.
Pugnas en la oposición que dejan fuera a sectores importantes
En estas elecciones las figuras más duras de la derecha quedaron fuera de la contienda por las inhabilitaciones del CNE, fundamentalmente de Leopoldo López y María Corina Machado entre otros. López está detenido acusado de instigar los sucesos de febrero del 2014 y con un juicio en curso por lo tanto no puede ser candidato; a María Corina Machado, a quien se le había destituido de su cargo de parlamentaria por aceptar la silla de Panamá en la OEA que le cediera el presidente de dicho país en ese entonces, Martinelli, ahora fue inhabilitada por 12 meses para cualquier cargo público por incumplir con la declaración jurada de patrimonio en la Contraloría General de la República. Movidas políticas obviamente.
Este lunes María Corina Machado acudió a la junta regional de Los Teques, estado Miranda, para "inscribirse" aún cuando sabía que estaba inhabilitada, pero su juego político central no era ese sino anunciar frente al registro electoral y ante las cámaras la persona que la iba a sustituir como candidata y quien sería además su "voz" en el Parlamento. Se trataba de Isabel Pereira, de Cedice Libertad, un observatorio de divulgación de sesgo derechista, propuesta por la organización de María Corina, Vente Venezuela, para imponerla en la tarjeta (lista) de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Pero ocurrió que la MUD le terminó “expropiando” la candidatura a María Machado y se la entregó a Freddy Guevara, del partido Voluntad Popular –el mismo de Leopoldo López-, tal como informó este miércoles en rueda de prensa el secretario del bloque derechista, Jesús Torrealba. Una decisión de la coalición opositora de la cual en verdad ya sabía de antemano Machado y por eso su inicial jugada política. Así las dos figuras más visibles del ala “dura” del derechismo venezolano quedaron fuera del ruedo y sin chances siquiera de colocar a ninguno, apenas a un segundón como Guevara, que incluso no tenía el apoyo de Leopoldo López que ya se lo había dado a María Corina Machado.
Pero el otro plato fuerte estaba por ser servido en la mesa de la derecha. La otra sorpresa fue que a Copei, el partido socialcristiano del país, lo dejaron fuera de la tarjeta de la MUD, siendo que le corresponde por derecho dentro de la alianza nada menos que 27 candidaturas a la Asamblea Nacional. Plazas que fueron cubiertas cómodamente y repartidas entre las otras fuerzas integrantes de la MUD a satisfacción y pactos de intereses y conveniencias. El argumento de Jesús Torrealba fue que la MUD se vio en la” obligación” de tender "un cordón sanitario" y aplicar una "especie de cuarentena" a Copei “para no perjudicar la alianza perfecta que se había logrado”, hasta que “se resuelva" la diferencia interna que se tiene dentro de los socialcristianos.
El caso es que una sentencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia dio a lugar respondiendo a un recurso de amparo de un sector de Copei, nombrando una directiva interina, y el supuesto “temor” de la MUD –¡pobres inocentes!- es que esta directiva nombrara a candidatos de dicho partido que podrían llegar a saltar la talanquera (expresión venezolana para quien salta de partido) a favor del chavismo, y que “no estaban dispuestos a aceptar cambios de una directiva impuesta por el Estado". Pretextos no faltaron para la repartija de 27 curules aprovechándose de cualquier situación insólita, actuando así los “demócratas” de la derecha que tanta clase quieren dar de “democracia interna” y externa también.
En el chavismo las cosas fueron “diferentes” pero de igual calaña y envergadura
En sí misma, como señalamos en su momento, las elecciones primarias que tuvo el PSUV no tenían otra importancia más que buscar la mayor afluencia a la misma como parte de la campaña electoral, pues la mayoría de los candidatos ya estaban predefinidos por lo que algunos llaman el sistema de imposición por cooptación de los candidatos y dirección interna del partido. Pero las sorpresas fueron mayores para sectores del chavismo de base que dicen defender el legado de Chávez frente a la política de Maduro.
Aquí incluso hasta amanecieron madrugados, pues la gran novedad fue que el derechista y dirigente de las “manitas blancas” Ricardo Sánchez ahora es integrante del bloque del chavismo, el llamado Gran Polo Patriótico que es hegemonizado por el PSUV. Sánchez ya andaba distante de la MUD, váyase a saber la causa, pero fue una gran figura, por ejemplo en las masivas marchas de la derecha durante el período del cierre de RCTV, ferviente defensor del derechismo y de Capriles. De repente el otrora “contrarrevolucionario” Ricardo Sánchez como se le decía en el chavismo, quien fue suplente de la opositora María Corina Machado y que después de su destitución asumió como diputado, pasó a ser parte de los “revolucionarios” del bloque de los partidos del gobierno. Al nomás hacerse público se soltó una lluvia de protestas que cualquiera puede registrar en la otrora emblemática y ahora venida a menos “aporrea”.
Así se pueden mencionar otros casos como el del emblemático William Ojeda, originario del chavismo, pero que integró por tiempo largo al partido de la derecha Un Nuevo Tiempo apoyando al candidato Manuel Rosales en las presidenciales del 2006 contra Chávez, y que se hiciera diputado en el 2010 por dicho partido, luego ferviente defensor de Capriles. Pero eso no fue todo, en las listas oficiales presentadas por el Polo Patriótico, de repente aparecen personajes que ejercen altos cargos en el gobierno como candidatos a diputados cuando ni siquiera habían sido nombrados e impuestos, y lo peor de todo es que se lanzan por estados en los cuales nunca han vivido (la ley indica que al menos deben ser residentes en el estado como mínimo cuatro años). Hablamos de gente del talante de Cilia Flores, la esposa de Maduro, y otra gran cantidad de integrantes del alto escalón que ni siquiera aparecieron en la primaria del PSUV.
Un período preelectoral cargado de tensión
“Cosas veredes, Cid, que harán hablar las piedras…”, como se dice en el anónimo y famoso Cantar de Mío Cid. Y verdades no faltan, pues lo que se expresa también en todo esto es parte de toda la transición del poschavismo solo que capaz esta parte con cierta dosis de comicidad en las disputas internas de los principales bloques políticos. Pero aún está por verse cómo se desarrollará todo el período electoral en los meses venideros, seguramente cargados de tensión. Pero estas parlamentarias tienen su particularidad y su desarrollo en la etapa de la decadencia abierta del chavismo. Pues, como hemos escrito, el resultado electoral de ser negativo para el chavismo puede impactar en el “cerrar filas” que han mantenido en lo más encumbrado del partido gobernante, moviendo el centro de gravedad interno y haciendo agrias las disputas internas. Por el lado de la derecha, en el marco de su división y juego de intereses, al ver la factibilidad de su ansiado deseo de sacar al chavismo del gobierno, pueden verse aceleradas sus disputas, que ya se observaron en estas peleas de los cargos parlamentarios.