EL PAIS - 11-05-2011
Los tanques bombardean uno de los focos de la revuelta en Siria
11/05/2011
Las fuerzas de El Asad castigan un barrio de la ciudad de Homs.-El Ejército libera a 300 personas en Banias después de dar por recuperado el orden y restablecidos los servicios básicos
EL PAÍS / REUTERS | Madrid / Ammán 11/05/2011
El régimen sirio sigue empeñado en ahogar a sangre y fuego las revueltas democráticas que exigen desde hace mes y medio el fin de la dictadura. Los tanques enviados por el Gobierno de Bachar El Asad a la ciudad de Homs, la tercera del país árabe, han abierto fuego esta mañana contra un barrio residencial, según informa Reuters citando a un activista de derechos humanos. "Homs está siendo sacudida por las explosiones provocadas por proyectiles de tanque y ametralladoras", ha narrado Najati Tayrara.
En otro de los escenarios de las protestas, la ciudad portuaria de Banias, las fuerzas y cuerpos de seguridad han liberado en las últimas horas a más de 300 personas arrestadas durante las múltiples manifestaciones que han tenido lugar en ese enclave, informa la cadena árabe Al Arabiya. Las liberaciones han sido confirmadas por grupos opositores y se producen después de que el Ejército diera por restaurados los servicios básicos y reducido el riesgo de nuevos choques. "Muchos de los liberados han sido golpeados con dureza y sometidos a insultos y vejaciones", ha denunciado Rami Abdelrahman, director del Observatorio sirio para los Derechos Humanos.
El agua, la electricidad y las telecomunicaciones han vuelto a Banias, pero los tanques permanecen desplegados en las principales avenidas, según ha podido constatar el observatorio. Doscientas personas, entre ellas varios líderes de la revuelta, han sido encarceladas, según ha denunciado este organismo.
Bouthaina Shaaban, un asesor del presidente sirio, ha defendido la actuación de las fuerzas de seguridad ante el desafío que en su opinión representan los "militantes armados" que han manipulado "las demandas legítimas de los ciudadanos" y que no son más que "una combinación de fundamentalistas, extremistas y contrabandistas".
"Creo que ya hemos superado el momento más peligroso. Espero que estemos presenciando el final de esta historia", ha explicado Shaaban a un corresponsal de The New York Times, uno de los escasos periodistas occidentales que ha sido autorizado a visitar el país durante unas horas. El resto de la prensa internacional sigue vetada.