El día 7/10 estuvo marcado por una inmensa manifestación en Río de Janeiro. Más de 50.000 profesores, estudiantes y diversos sectores de trabajadores y jóvenes en apoyo a su lucha tomaron las calles. También fue un día de furia y renovada represión policial. Furia que se expresó en ataques a importantes símbolos del poder como la Cámara de Concejales, el Club Militar (institución que apoyó y todavía defiende a la dictadura) y el Consulado norteamericano. La represión a su vez instauró su habitual persecución a manifestantes e impuso el estado de sitio en esta ciudad que está comenzando a acostumbrarse a las barricadas y ya no acepta la represión policial con el mismo silencio. El caso de Amarildo tuvo un vuelco obligando a la policía a admitir que torturó, mató y desapareció al cuerpo del pedrero negro.
Con esta represión el gobierno de Rio está logrando minar su más importante conquista de los últimos años, la aceptación de la policía asesina y racista por la población (alabada en películas y canciones pocos años atrás). A todo esto se suma una serie de medidas de persecución a quienes los medios y el gobierno denominan “vándalos”.

Hace casi 60 días los profesionales de la educación de la ciudad de Rio de Janeiro entraron en huelga, después de 19 años contra el Plan de Cargos y reajustes salariales. Con una adhesión masiva de cerca del 80% y asambleas multitudinarias han enfrentado la campaña de los medios en contra -que incluye tapas de diarios con falsas sentencias del poder judicial, declaraciones de falsos aumentos y negociaciones, amenazas de no pago de la prefectura de Eduardo Paes (del PMDB, importante aliado de Dilma y el vice Adilson Pires del PT que es parte del gobierno) y más que nada con la policía del cuestionado gobernador Sérgio Cabral (también del PMDB). Como siempre, la justicia se presenta como instrumento de la represión al derecho de huelga, permitiendo escandalosamente arbitrariedades y amenazas de los gobernantes.

La saña represiva de la dupla Paes-Cabral (con el silencio cómplice del PT y del PCdoB) llegó al punto de impedir la circulación (aún a pie) por diversos lugares de la ciudad para que fuese votado un plan de cargos y salarios, a los que los profesores se oponen. Sólo con métodos de estado de sitio es que estos gobernantes -contando con la casta de políticos corruptos de la Cámara Municipal y la Legislatura- han lgorado aprobar sus planes. Sin embargo, aún así, los profesores siguen en lucha y todo el país se conmovió, organizando manifestaciones en su apoyo. Los 50.000 del 7/10 posiblemente serán ampliamente superados en la nueva manifestación del 15/10 (día del profesor).

Lo que los profesionales de la educación de Rio (profesores, merenderos, educadores infantiles, y otros) consiguieron es expresión de una continuidad pero también de una transformación del “espíritu de junio”. Miles en las calles pero ahora con una centralización fundamental de un sector de la clase trabajadora. Un sector que no hacía huelga desde hace 19 años es el centro de la política nacional, ganando apoyo popular por representar la defensa de los derechos sociales fundamentales como la educación pública y de calidad.
Este escenario se da en medio del resurgir del movimiento estudiantil, con huelgas y ocupaciones en las importantísimas USP y Unicamp en San Pablo, así como una tendencia a paros y asambleas en numerosos cursos de secundarios y universitarios en Rio. Existe la posibilidad de una huelga general de la educación, primero en Rio pero también a nivel nacional. En Río hay diversos sectores de la educación en huelga y el único límite para esta confluencia son las direcciones tanto de los estudiantes como de los trabajadores.

En primer lugar, la Unión Nacional de Estudiantes (UNE, dirigida burocráticamente por el PCdoB) y sectores de la educación ligados a la CUT han participado de manifestaciones pero se niegan a hacer cualquier construcción seria de esta lucha en sus bases universitarias ni en los secundarios de la UBES. La CUT por su lado se niega a tomar cualquier acción de solidaridad en el mayor sindicato del país, el sindicato de los profesores de San Pablo (Apeoesp), pues sigue vinculada a los gobiernos petistas y a los capitalistas. Le cabe a los sectores antigubernamentales organizar una inmensa campaña para la confluencia de las luchas y para que esta tendencia objetiva a la huelga general de la educación se realice.

El sindicato de los Profesionales de la Educación (SEPE) dirigido por corrientes del PSOL y minoritariamente por el PSTU podrían llamar a la juventud y a todos los sectores de trabajadores de Río a sumarse a la lucha y a coordinar acciones. Ni siquiera están coordinando la lucha municipal con la huelga de la educación estatal que dirige el mismo sindicato, realizando actos y asambleas separados. Es necesario un profundo cambio en la orientación: podríamos tener una coordinación carioca de la educación e incisivas acciones unitarias. Desde ahí sería posible incidir en las bases de la CUT llamando a acciones nacionales por la victoria de la lucha de los trabajadores de la educación en Rio. Podemos poner en pie una lucha de los trabajadores y del movimiento estudiantil en todo el país no sólo por la victoria de Rio sino por más que esto, para dar continuidad a la reivindicación popular de junio por educación pública, gratuita y de calidad, luchando por las condiciones de trabajo de los profesores, pero también por el fin del filtro social del examen de ingreso, entre otras reivindicaciones históricas de la juventud.

Para la LER-QI, junto a los compañeros de Juventude ás Ruas y del grupo de mujeres Pão e Rosas, se trata de una lucha ejemplar que permite y exige llevar a cada sector y, antes que nada, al movimiento estudiantil, la posibilidad de cambiar completamente la rutina y ponerse a tono con “junio” y con este “octubre caliente”, derrotando a los gobiernos de Paes y Cabral. Hagamos huelgas y luchas en cada universidad y escuela estatal que no esté en huelga, impulsemos acciones de coordinación y lucha en todos los locales de estudio y trabajo.

¡Viva la lucha de la educación de Río!

¡Por la inmediata revocación del plan de carrera impuesto por los concejales y el intendente Paes!

¡Por una respuesta inmediata de las reivindicaciones de los profesionales de la educación!

09/10/2013