Alemania
20.000 en Frankfurt contra el Banco Central Europeo
24/05/2012
Por Wladek Flakin
20.000 personas vinieron a la capital financiera de Alemania, Frankfurt, el pasado 19/5 para participar en una marcha multitudinaria contra el Banco Central Europeo y la política de austeridad que este está imponiendo a toda Europa. En los días anteriores dos mil manifestantes habían bloqueado bancos y plazas en la ciudad, a pesar de una prohibición para todo tipo de manifestaciones por parte de la policía.
La protesta –que se llamó "Blockupy Frankfurt", combinando las palabras para "bloquear" y "ocupar"– fue enfrentada por una oleada de represión sin precedentes desde las protestas contra la cumbre del G8 en Heiligendamm en el año 2007. Ya en las semanas anteriores la policía escribió a cientos de personas que habían sido detenidas en una marcha en Frankfurt en Marzo para prohibirles la entrada a la ciudad. En el camino a Frankfurt, buses llenos de activistas fueron parados y puestos en detención preventiva. En los bloqueos mismos, cientos de personas fueron detenidas y aún más golpeadas. En total unos 5.000 policías fueron desplegados lo que llevó a algunos diarios a decir que había sido la policía, más que los activistas "Blockupy", quienes habían parado la ciudad entera.
En la marcha participaron manifestantes de toda Alemania y también de Francia, Italia y otros países europeos. La solidaridad internacional se expresó a través de banderas griegas o en los discursos en otros idiomas. A la vez, la participación del movimiento obrero fue bastante reducida (con la excepción de sindicatos franceses como SUD o CGT), producto de la política de la burocracia sindical de limitarse a demandas "responsables" que no dañen al capital alemán. El mismo día de la marcha, la burocracia del sindicato metalúrgico llegó a un acuerdo sobre aumentos salariales en el sector industrial más importante para el imperialismo alemán. Ante las ganancias históricas que están teniendo las automotrices alemanas, la burocracia sólo consiguió menos de 4% de aumento, aceptando a la vez la consolidación de condiciones precarias del trabajo. Este tipo de negociaciones crean mucho descontento en la base de los sindicatos, pero todavía ningún rechazo abierto. El aumento de la represión también tiene un carácter preventivo, preparando el aparato estatal para enfrentar a movimientos más amplios en el futuro.
Estas protestas tienen lugar en el marco de crecientes objeciones hacia la política del imperialismo alemán en la Unión Europea, culminando con la presión combinada de los presidentes Hollande y Obama hacía Merkel para abandonar la política de austeridad dura. Por eso las contradicciones dentro del "corazón de la bestia" pueden tener un gran impacto internacional. Por ejemplo una semana antes, el partido conservador de Merkel había perdido las elecciones en la mayor provincia del país, Renania del Norte-Westfalia, con su peor resultado en la historia. Esto condujo al despido del ministro de Medio Ambiente, Röttgen, quien había sido encargado de la campaña electoral en la provincia.
Es sólo a través de la lucha contra su propio imperialismo que la clase obrera en Alemania puede defender sus viejas conquistas y ganar nuevas. Pero el partido socialdemocráta SPD, estrechamente vinculado con la burocracia sindical, no presenta ninguna alternativa a Merkel y su política de austeridad. También el partido reformista "Die Linke" se ha limitado, a pesar de algunas declaraciones progresistas, a apoyar gobiernos socialdemócratas a nivel provincial. Por eso los marxistas revolucionarios de la Organización Internacionalista Revolucionaria (RIO), sección simpatizante de la Fracción Trotskista en Alemania, hemos participado en las marchas de Frankfurt con un perfil antiimperialista, usando el lema del comunista alemán Karl Liebknecht: "El enemigo principal está en el propio país!".
23-05-2012